martes, 11 de marzo de 2014

VIDAS MARCHITAS


AL IGUAL QUE LAS PLANTAS, NUESTRA VIDA ESPIRITUAL PUEDE MARCHITARSE Y VOLVERSE MUSTIA, PERDER SU HERMOSURA, SU FUERZA Y VITALIDAD, POR FALTA DE CUIDADOS.

LAS PLANTAS DEBEN REGARSE PARA QUE CREZCAN Y MANTENGAN SU ASPECTO BELLO. CUANDO SE RIEGAN DE LA FORMA NECESARIA, LAS HOJAS REVERDECEN Y MANTIENEN SU BRILLO Y SU COLOR VIVO, PORQUE SE NUTREN Y RECIBEN VIDA, ESA MISMA VIDA QUE SE DESPRENDE DE SUS TRONCOS Y DE SU HOJAS.

PERO CUANDO UNA PLANTA DEJA DE RECIBIR SUS CUIDADOS, EMPIEZA A PRESENTAR UN ASPECTO DESLUCIDO, SUS HOJAS PIERDEN VIGOR Y SUS TRONCOS SE DEBILITAN Y SE TUERCEN. SU FLOR SE CIERRA Y SUS HOJAS CAEN. Y LEJOS DE TRANSMITIR VIDA, LO QUE DESPRENDEN ES LANGUIDEZ Y MUERTE Y SI EL RIEGO SE DESCUIDA DEMASIADO, TERMINA POR MORIR.

ASÍ NOS PASA A LAS PERSONAS, CUANDO NO RECIBIMOS LA SAVIA DE DIOS. SI NO NOS ALIMENTAMOS CADA DÍA DE LA PALABRA DE DIOS Y DE LA ORACIÓN, NUESTRA VIDA ESPIRITUAL SE DEBILITA Y ENFERMA. NUESTRA APARIENCIA NO REFLEJA LA BELLEZA DEL SALVADOR Y PERDEMOS LA FUERZA QUE NECESITAMOS PARA ESTAR EN CONDICIONES Y SER USADOS POR DIOS.

NECESITAMOS DE DIOS PARA MANTENERNOS Y SIN ÉL NO SOMOS NADA, ESTAMOS PERDIDOS.

Colosenses 2:19
y no asiéndose de la Cabeza, en virtud de quien todo el cuerpo, nutriéndose y uniéndose por las coyunturas y ligamentos, crece con el crecimiento que da Dios.

UNA PLANTA NO ES NADA POR SÍ MISMA SI NO RECIBE LOS CUIDADOS QUE NECESITA Y SI NO ESTÁ EN SU ENTORNO, CON LAS CONDICIONES CLIMÁTICAS NECESARIAS. SI SACAMOS A UNA PLANTA DEL LUGAR DONDE NECESITA ESTAR, SE MARCHITA.

LO MISMO NOS OCURRE A NOSOTROS CUANDO SALIMOS DEL LUGAR DONDE DIOS QUIERE QUE ESTEMOS Y NOS MOVEMOS EN OTROS AMBIENTES, PORQUE ENTONCES NOS ESTAMOS APARTANDO DE LO QUE NOS ES FAVORABLE, PARA ENTRAR EN LUGARES QUE SOLO PUEDEN PERJUDICARNOS Y HACERNOS DAÑO. MUCHAS VECES NO SE VE AL PRINCIPIO, PERO CUANDO PASA UN TIEMPO, SE EMPIEZA A PERCIBIR EL DETERIORO Y SI VOLVEMOS DE NUEVO AL LUGAR DEL QUE SALIMOS, VOLVEMOS A REVIVIR.

NECESITAMOS A DIOS, MÁS QUE AL AIRE QUE RESPIRAMOS. CRISTO ES NUESTRA VIDA Y NO PODEMOS APARTARNOS DE ÉL, SI QUEREMOS MANTENERNOS FIRMES Y SER FORTALECIDOS.

NECESITAMOS EL RIEGO DIARIO DE DIOS, RECIBIR SU LUZ, ALIMENTARNOS DE SU SAVIA Y BEBER DE LA FUENTE DE VIDA QUE ES CRISTO.
HEMOS DE ASIRNOS DE LA CABEZA Y NUTRIRNOS DE ÉL, SI QUEREMOS RECIBIR EL CRECIMIENTO QUE DA DIOS.

Y SI QUEREMOS LLEVAR A OTROS EL EVANGELIO, ¿CÓMO LO HAREMOS SI NO PODEMOS MANTENERNOS EN PIE? SI NO TENEMOS LA FUERZA QUE NECESITAMOS, NO PODREMOS LLEVAR A OTROS LO QUE NO RECIBIMOS.
PARA DAR, PRIMERO HAY QUE ESTAR LLENO Y PARA TRANSMITIR LA FUERZA Y EL PODER DE DIOS A TRAVÉS DE NOSOTROS, HEMOS DE SER VASOS QUE SE DEJEN LLENAR DE DIOS.

Juan 15:5
Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.

EL FRUTO SE MANIFIESTA, PRIMERAMENTE EN NOSOTROS, EN LAS CONDICIONES EN QUE ESTAMOS. ES FÁCIL VER CUANDO UN CRISTIANO ESTÁ FIRME EN EL SEÑOR Y DETECTAR CUANDO ALGO NO MARCHA BIEN. DE LA ABUNDANCIA DEL CORAZÓN HABLA LA BOCA Y ASIMISMO, NUESTROS ACTOS SON UN REFLEJO DE CÓMO ESTÁ EL ESPÍRITU. UN CRISTIANO MUSTIO, APÁTICO, DECAÍDO, QUE REFLEJA EN SU CARA LA TRISTEZA,
¿CÓMO PODRÁ HABLAR DE CRISTO Y DE LA ESPERANZA Y EL GOZO DE LA SALVACIÓN?
¿CÓMO PODRÁ COMUNICAR A OTROS, LO QUE ÉL MISMO NO SIENTE?

POR ESO, NUESTRO FRUTO ES EL RESULTADO DE COMO ESTAMOS POR DENTRO. SEGÚN SEA EL ÁRBOL, ASÍ SERÁN LOS FRUTOS.

¿HAS PERDIDO EL VIGOR QUE ANTES TENÍAS?
¿TU IMAGEN NO REFLEJA LA BELLEZA DEL SALVADOR?
¿SE HA APAGADO TU PRIMER AMOR?

PUES APLICA LA ENSEÑANZA DE LAS PLANTAS, DEJA QUE DIOS TE RIEGUE Y TE DE SU LUZ. ALIMÉNTATE DE SU PALABRA, NÚTRETE DE SU PRESENCIA A TRAVÉS DE LA ORACIÓN Y DEJA QUE SU SANTO ESPÍRITU TE RENUEVE POR DENTRO Y TE FORTALEZCA, PARA QUE VUELVA TU VIGOR.
ELEVA TU MIRADA AL CIELO, PORQUE SOLO DIOS PUEDE DEVOLVERTE EL GOZO PERDIDO, Y DARLE VIDA A TU ÁNIMO DECAÍDO.

Efesios 6:10
Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuerza.

Isaías 40:29
El da esfuerzo al cansado, y multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas.

Isaías 40:31
pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán.

SEAMOS ÁRBOLES Y PLANTAS DE DIOS. PLANTADOS JUNTO A CORRIENTES DE AGUAS.

Salmos 1:3
Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas, Que da su fruto en su tiempo, Y su hoja no cae;Y todo lo que hace, prosperará.

MAYTE CARBONELL
2-3-2014






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