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viernes, 1 de abril de 2016

DIVINIDAD Y HUMILDAD DE CRISTO



Filipenses 2:6 el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse,
7sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres;
8y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.


SOLAMENTE EN ESTOS TRES VERSÍCULOS ENCONTRAMOS LA DIVINIDAD DE CRISTO Y A LA VEZ, LA HUMILDAD. COMO SIENDO DIOS, LLEGÓ A RENUNCIAR A LO QUE ESO SIGNIFICABA Y SE VACIÓ A SÍ MISMO, Y ADOPTÓ FORMA DE SIERVO HASTA LAS CONSECUENCIAS MÁS BAJAS, PORQUE SE HUMILLÓ HASTA LA MUERTE Y SE HIZO MALDICIÓN EN LA CRUZ, CARGANDO CON NUESTROS PECADOS, PARA QUE DIOS DESCARGARA SOBRE ÉL, TODA LA IRA QUE TENÍA PARA NOSOTROS.

Gálatas 3:13
Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición (porque está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero),


¿QUIÉN HARÍA ALGO ASÍ?
¿SE PUEDE DAR MAYOR MUESTRA DE AMOR?

CRISTO, SIENDO DIOS, TODO UN REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES, SE HACE HUMILDE, NACE DE LA FORMA MÁS POBRE, SIN OSTENTACIONES, SINO EN UN ESTABLO Y SIGUIÓ SUS DÍAS EN LA MISMA ACTITUD DE HUMILDAD Y SENCILLEZ, HASTA SUS ÚLTIMAS CONSECUENCIAS, DAR SU VIDA EN RESCATE POR TODOS. BEBIÓ LA COPA MÁS AMARGA Y LO MÁS MARAVILLOSO ES QUE ÉL YA SABÍA DESDE ANTES DE LA CREACIÓN DEL MUNDO, LO QUE IBA A HACER.

CRISTO ES EL MEJOR EJEMPLO DE HUMILDAD, QUE NO SOLAMENTE VINO A DAR SU VIDA POR NOSOTROS, SINO QUE VINO TAMBIÉN PARA ENSEÑARNOS A VIVIR Y A TRATAR A NUESTROS SEMEJANTES.
AQUÍ TENEMOS UN CLARO EJEMPLO:

Juan 13:4  se levantó de la cena, y se quitó su manto, y tomando una toalla, se la ciñó.
5Luego puso agua en un lebrillo, y comenzó a lavar los pies de los discípulos, y a enjugarlos con la toalla con que estaba ceñido.


¿NO SENTIMOS VERGÜENZA AL LEER ESTO?
¿QUIENES NOS CREEMOS QUE SOMOS, CUANDO SIENDO CRIATURAS PECADORAS, CAÍDAS Y MISERABLES, NOS ATREVEMOS A SER EGOÍSTAS, SOBERBIOS, ALTIVOS Y HASTA CRUELES, TRATANDO A LOS DEMÁS COMO SI FUÉRAMOS MÁS QUE ELLOS Y MIRANDO A OTROS POR ENCIMA DEL HOMBRO?

¿QUIÉN SOY YO? ¿QUIÉN ERES TÚ?
SI ÉL SIENDO JUSTO, PERFECTO, SIN PECADO Y SIENDO DIOS MISMO, SE VACIÓ DE TODA SU GLORIA Y SE VISTIÓ DE HUMILDAD, ¿CÓMO PODEMOS SEGUIR ALTIVOS?

REFLEXIONEMOS EN EL GRAN AMOR DE DIOS. PENSEMOS EN SU MAJESTAD Y A LA VEZ, EN SU SENCILLEZ Y HUMILDAD, PARA QUE ÉL NOS AYUDE A VIVIR IMITANDO SU EJEMPLO.

Marcos 10:45
Porque el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos.



Lucas 14:11
Porque cualquiera que se enaltece, será humillado; y el que se humilla, será enaltecido.


1 Pedro 5:6
Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte cuando fuere tiempo;

 

MAYTE CARBONELL
1-4-2016




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