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miércoles, 10 de septiembre de 2014

AFERRADOS AL PADRE

Mas yo en ti confío, oh Jehová; Digo: Tú eres mi Dios.

Aunque afligido yo y necesitado, Jehová pensará en mí. Mi ayuda y mi libertador eres tú; Dios mío, no te tardes.

ASÍ SOMOS NOSOTROS, COMO NIÑOS DESVALIDOS, QUE NECESITAN ACERCARSE A SU PADRE Y SENTIR SU PROTECCIÓN.

NADIE COMO DIOS PUEDE HACERNOS SENTIR SEGUROS, EN PAZ, CONFIADOS Y FELICES, PORQUE CON ÉL LO TENEMOS TODO Y SABEMOS QUE ESTAMOS EN LAS MEJORES MANOS Y QUE NO HAY NADIE QUE PUEDA DARNOS NI SIQUIERA UNA MILÉSIMA PARTE DE LO QUE ÉL NOS DA.

CRISTO ES NUESTRO MEJOR AMIGO, NUESTRO DIOS, NUESTRO PADRE PROTECTOR, Y QUIÉN NOS SUSTENTA Y NOS CUIDA. EL QUE NOS DEFIENDE DE LOS ATAQUES DEL ENEMIGO Y NOS GUARDA DE PELIGROS Y DE TODO MAL. QUIÉN CUANDO CLAMAMOS A ÉL PIDIENDO AYUDA, ACUDE EN NUESTRO AUXILIO.

ES EL DIOS FUERTE, GRANDE, OMNIPOTENTE, SABIO, AL LADO DE QUIÉN ESTAMOS TRANQUILOS, PORQUE NINGUNO PUEDE HACERLE FRENTE.

SOMOS CONSCIENTES DE NUESTRA PEQUEÑEZ, DE NUESTRAS LIMITACIONES Y DE NUESTOS FALLOS. Y SABEMOS QUE ÉL ES TODO LO CONTRARIO, ES GRANDE, NO EXISTEN LÍMITES PARA ÉL Y ES INFALIBLE, PUES JAMÁS SE EQUIVOCA NI COMETE ERRORES.

Y QUIENES NO SON CONSCIENTES DE ESTO, JAMÁS EXPERIMENTAN LA MANO PODEROSA DE DIOS EN SUS VIDAS, PUES AUN CUANDO ÉL INTERVINIERA, NO SABRÍAN RECONOCERLO. Y MUCHOS EMPIEZAN A EXPERIMENTARLO, DESPUÉS DE MUCHOS FRACASOS.

POR ESO, QUIÉN DESDE TEMPRANO APRENDE A CAMINAR CON DIOS COMO AMIGO, TIENE EL MAYOR TESORO Y ES UN PRIVILEGIADO. PORQUE NO PODEMOS CONFIAR NUESTRA VIDA A NINGÚN OTRO MEJOR QUE A ÉL.

ESTO ES LO QUE PASA CUANDO VENIMOS A REFUGIARNOS AL AMPARO DE DIOS

Jehová recompense tu obra, y tu remuneración sea cumplida de parte de Jehová Dios de Israel, bajo cuyas alas has venido a refugiarte.

El que habita al abrigo del Altísimo Morará bajo la sombra del Omnipotente.
2 Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo mío;
Mi Dios, en quien confiaré.

3 El te librará del lazo del cazador,
De la peste destructora.

4 Con sus plumas te cubrirá,
Y debajo de sus alas estarás seguro;
Escudo y adarga es su verdad.

5 No temerás el terror nocturno,
Ni saeta que vuele de día,

6 Ni pestilencia que ande en oscuridad,
Ni mortandad que en medio del día destruya.

7 Caerán a tu lado mil,
Y diez mil a tu diestra;
Mas a ti no llegará.

8 Ciertamente con tus ojos mirarás
Y verás la recompensa de los impíos.

9 Porque has puesto a Jehová, que es mi esperanza,
Al Altísimo por tu habitación,

10 No te sobrevendrá mal,
Ni plaga tocará tu morada.

11 Pues a sus ángeles mandará acerca de ti,
Que te guarden en todos tus caminos.

12 En las manos te llevarán,
Para que tu pie no tropiece en piedra.

13 Sobre el león y el áspid pisarás;
Hollarás al cachorro del león y al dragón.

14 Por cuanto en mí ha puesto su amor, yo también lo libraré;
Le pondré en alto, por cuanto ha conocido mi nombre.

15 Me invocará, y yo le responderé;
Con él estaré yo en la angustia;
Lo libraré y le glorificaré.

16 Lo saciaré de larga vida,
Y le mostraré mi salvación.



VALE LA PENA ESTAR AFERRADO A DIOS.
SI TÚ TODAVÍA NO LO ESTÁS, NO PIERDAS MÁS TIEMPO BUSCANDO REFUGIO EN COSAS QUE SE DESVANECEN Y QUE NO PUEDEN DARTE SEGURIDAD.
VEN A LOS BRAZOS DE DIOS, QUE ÉL TE ESTÁ ESPERANDO, PARA DARTE TODO SU AMOR.



MAYTE CARBONELL
4-9-2014





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